Imprecisiones sobre lo indecible

 Anabella Hormachea


EN PORTUGUÉS

Araña, corcho, perla
Y cuatro más que no digo
Son palabras perfectas.
Morir es insuperable.
Dios no tiene ningún peso.
Mariposa es asopiram,
un jabón hirviendo en la olla.
Ojalá estas rarezas
sean psicologismos,
desviaciones debidas
al pecado original.
Palabras, las querría antes como cosas.
Mi cabeza se cansa
en este discurso infeliz.
Jonathan me dijo:
“¿Ya tomaste tu yogurt?”
¡Qué dulzura me cubrió, qué consuelo!
Las lenguas son imperfectas
para que los poemas existan
y yo pregunté de dónde vienen
los insectos alados y este afecto,
tu brazo rozando el mío

Adelia Prado

 

  • Imprecisiones sobre lo indecible:

Un acertijo:

Se dici il mio nome non esisto più. ¿Chi sono?

  • Primero:

“El hombre es invitado a hablar de su verdad”.

Un día cualquiera el encuentro con el inconsciente me habilitó a hacerme una pregunta… de pronto el otro podía quedar en un- tiempo fuera- cuando me atrevía a preguntarme ¿qué quiero decir?; ¿por qué hablo más allá de lo que quiero decir?; ¿qué es eso que habla?…

Me topé con el inconsciente… vivo, encontraba su salida a través de una mano escribiente sin dejarme siquiera ordenar lo que aparecía, eran arrebatos, garabatos sin sentido, trazos de pintura en un papel cualquiera, que me ofrecía grietas para salir a un afuera que no estaba más que adentro…

No hay actualidad. Hay historización.

¿Cuántas capas me envuelven? ¿Cuánto recubre lo que no podré saber jamás?

El psicoanálisis era el telonero del teatro de lo que sólo puede decirse a medias, en acto. ¿El guión? ¿Está escrito? ¿El papel? ¿Cómo se interpreta si la cortina está cerrada? ¿Hay un final para esta obra? El final se empieza a escribir cuando la función ya terminó. Si la palabra se alza ya no será a condición de que el telón se abra al espectador.

Palabras para decir de un algo… un algo inmenso… ¿quién ha sido mi interlocutor?

El psicoanálisis me llevó a sacar de a poco toda la utilería de mi escenario… se vació, para que en el eco resonara algo… a veces aparecían por allí un florero, una silla, un vestido… y los objetos se devoraban mis palabras…

¿Cuántas obras se escribieron?… ¿sólo una?

¿Qué hace un psicoanálisis?

¿Desmonta la obra? ¿Y el guión? ¿Y el papel? ¿Y el espectador? Sólo quien se atreve a escribir podrá encontrar en su acto un nombre para eso.

“Un amor real es como dormir y estar despierto” dice Charly: palabras que dicen de aquel día cualquiera en que me topé con el inconsciente.

  • Alguna precisión

“Ningún amo está en posición de dominar el trabajo acéfalo del significante una vez alcanzado”.

“Lo que Lacan califica como deseo de saber no debe confundirse con el deseo de saber científico y tampoco con el deseo de no saber que es el estilo propio de la docta ignorancia. Es el problema- definir ese deseo de saber, inédito que encuentra su fuente en el saber científico sin por ello confundirse con él y que atraviesa la docta ignorancia para llegar a esta práctica extraña que se llama psicoanálisis”

Qué es un analista y cómo reconocerlo.

“Ahora bien, es tan necesario plantearla como imposible darle una respuesta válida para todos y verificable por todos, objetiva a falta de ser científica. ¿Cómo podría ser de otro modo, si es cierto que el analista es el producto de su propio análisis, es decir, de una confidencia que no se parece a ninguna otra, que sólo puede hacerse a uno solo? Ahí está la tragedia- y la comedia- de los que practican el análisis”.

“Ni los psicoanalistas, ni nadie, pueden decir lo que es El psicoanalista como tal. Es un hecho de experiencia sin duda, pero porque es un impasse estructural: El psicoanalista no existe- lo cual no impide, por el contrario, que los psicoanalistas crezcan y se multipliquen-.

La verdad es que no hay esencia del analista.

Nunca hay “todos los analistas”, no hay “el analista de los analistas”, sólo hay analistas, uno y uno y uno, cada uno “autorizándose a sí mismo”, y que forman una serie, pero no un universo”.

(MILLER, J.A. “Cómo terminan los análisis”. Ed. Gramma. 2022)

  • ¿Y qué más?

¿Será que sólo se puede decir del psicoanálisis aquello que de la experiencia analítica se puede extraer sólo en acto? La fe, el amor al inconsciente… tragedia y comedia, como es el amor y el inconsciente… coraje de un decir que sólo puede hacer condescender el horror, en un acto de fe y amor… en y por el inconsciente.

Hasta acá.


Artículo presentado para la finalización del curso teórico-clínico anual 2022.


Guillemo Lorca García 2021 La cama inglesa
Guillemo Lorca García, 2021, La cama inglesa

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